En un partido de genuino aullido y volteretas, los Pumas confirmaron su gran instante y derrotaron 4-3 a Santos, que prosigue sin ganar como local en el campeonato. Los tantos universitarios fueron obra de M. Britos, E. Herrera y también un doblete de I. Sosa, por la parte de los laguneros descontaron J. Orozco, A. Rentería y N. Araujo.
La primera parte en el Territorio Santos Modelo, el equipo liderado por Pako Ayestarán procuró poner condiciones y apenas al minuto nueve lo lograron al abrir el marcador. Fue en un tiro de esquina, cuando J. Orozco se libró de la pésima marca auriazul y apareció totalmente solo para fusilar al arquero A. Palacios que quedó sin alguna ocasión.
La mejor ofensiva del campeonato apareció por partida triple en un lapso de quince minutos. Primero fue el uruguayo M. Britos que prosigue en plan goleador y en una jugada a balón parado, ganó por arriba a sus marcadores y remató de estupenda forma frente a la estirada del portero lagunero que solo sirvió para la fotografía.
Poco le duró el gusto a los capitalinos por el hecho de que mientras que ciertos pumas proseguían celebrando el empate, llegó una nueva desatención protectora en el área que aprovechó A. Rentería, y únicamente empujó el esférico en el fondo de las redes para adelantar de nueva cuenta a los guerreros.
En la jugada siguiente, los felinos le dieron una cucharada de su chocolate a los blanquiverdes. En una serie de rebotes, E. Herrera 'rebanó' el balón que, involuntariamente deseando, entró a la portería frente a la mirada estupefacta de A. Marchesin.
Minutos ya antes de terminar el primer lapso, I. Insípida dio la voltereta de insensatez en una jugada entre J. Cortés y F. M., donde el ecuatoriano mandó un centro como con la mano, a fin de que Insípida la prendiese de cabeza y la mandara a guardar.
Para el complemento, prosiguió exactamente la misma intensidad de las dos escuadras para acrecentar el número de anotaciones en su cuenta. Mas fue el equipo local, al minuto sesenta y tres que consiguió el empate a 3 tantos. N. Araujo se sumó al ataque y se halló con un balón que no pudo despejar ‘Pikolin’ de buena forma y mandó un 'riflazo' que fue imposible despejar para la defensa del Pedregal.
No conformes con el desenlace, los alumnos de G. V. volvieron a recobrar el beneficio en un contragolpe mortal, que concluyó I. Insípida con una enorme definición, para llenar su doblete y el tanto terminante del encuentro.
